El sábado 17 de mayo, la Parroquia de la Santa Cruz, en Puerto General Nicolás Bravo, mejor conocido como Filo de caballos, recibió la cruz de la Misión joven, con motivo del Jubileo que este año vivimos como Iglesia, cuyo lema es Peregrinos de la esperanza. Esta Cruz recorrerá cada una de las Parroquias que conforman la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa durante el presente año.

 

Dentro de este marco festivo, se convocó a los jóvenes de la Parroquia a participar en un Encuentro juvenil el domingo 18 de mayo. Hubo una muy buena respuesta de parte de las comunidades logrando la asistencia de 120 jóvenes. El encuentro comenzó con la bienvenida y oración por parte del párroco, P. Mario Felipe Quiroga Venegas, quien exhortó a los jóvenes a darse la oportunidad de convivir con entusiasmo, alegría y responsabilidad. Posteriormente el coro de la comunidad de Carrizal de Bravo animó el encuentro con cantos y dinámicas. 

 

El momento de la reflexión giró en torno al tema de la vocación, como el llamado que Dios nos hace para vivir con sentido, alegría y entrega hacia los demás, desde los tres estados de vida, a saber: soltería, vida consagrada-sacerdotal y el matrimonio. Hubo un momento de diálogo, preguntas y respuestas entre los jóvenes y un matrimonio, un joven soltero y un religioso; donde se compartió con alegría la experiencia de cada uno, sus dificultades, retos y la riqueza de cada estado de vida.

 

Posteriormente se organizó un Rally, donde por equipos, con su propia bandera y «grito de batalla», fueron superando cada uno de los retos que ofrecían las diferentes bases con un encargado para explicar las reglas del juego. Al final de la competencia se reconoció el esfuerzo y entusiasmo del equipo ganador. 

 

El culmen de la jornada llegó con un momento de oración; después los jóvenes salieron en procesión por las calles de la comunidad llevando consigo la imagen de la Virgen de Guadalupe y la Cruz de la Misión joven, signos de que nuestro caminar es más alegre de la mano de Jesús y María. Se percibió un ambiente de entusiasmo y disponibilidad acompañado por las alabanzas animadas por el coro.

 

Al final, se compartieron los alimentos donados por la Carrera Guadalupana, que generosamente también contribuyó para la realización de este encuentro.

 

Damos gracias a Dios por la alegre respuesta de los jóvenes de nuestra Parroquia y le pedimos la luz de su Espíritu para saberlos acompañar.

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Diác. José Pablo Lara Chávez, C.P.